sábado, 31 de marzo de 2018

Mañana será otro día


 Ricardo G-Aranda Rojas (@rgarciaaranda)



La vida tampoco es el cuento de hadas que en varias TV públicas nos cuentan en esos programas de asturianos, manchegos, madrileños…, españoles por el mundo. Está bien contar las historias de aquellos a los que les va bien, faltaría más, pero hay más cosas, hay más gentes.

Hay verdaderos dramas entre mujeres y hombres que dejan su pueblo, su ciudad, su país buscando “el Dorado” y sólo encuentran miseria, abusos, fracaso, pobreza…Es la otra realidad, esa de la que parece preferible hablar poco, porque es incómoda, es triste y no vende. Son medios de comunicación públicos, y renuncian a mostrar la realidad humana, prefieren pintar el mundo de rosa y negar el dolor del fracaso.

viernes, 23 de marzo de 2018

La Vuelta al Pasado (Pesadilla en Zocodover VI).


 Ricardo G-aranda. (@rgarciaaranda)



Podemos inventarnos un futuro, se llama sueño o pesadilla, o simplemente imaginación.  Lo podemos inventar para nosotros mismos o para los demás, para las personas que conocemos, incluso para las que no, porque puestos a inventar historias ¿Qué nos impide crear de la nada a los personajes? Esa es la evidencia de los escritores, construimos vidas, a veces con tanto detalle que el lector dudará hasta dónde son verdaderos o falsos. Ni el mismo inventor lo sabe siempre. Pero, igualmente, abundan versiones de vidas inexistentes en las cabezas de esa inmensa mayoría de humanos que no las exhiben escribiéndolas.
También podemos inventarnos un presente si el conocimiento de la realidad es lo suficientemente ambiguo como para dejar libres los necesarios huecos que los demás, escritores o no, nos esforzamos en rellenar adecuando esa realidad a lo que nuestra imaginación nos demanda.

viernes, 16 de marzo de 2018

La Maliciosa, el reto (Pesadilla en Zocodover V)




Ricardo Garcia-Aranda Rojas. (@rgarciaaranda)


La ciudad, sin duda, tiene sus encantos.
Hay ruido y la gente va deprisa, los edificios y la contaminación no te dejarían ver bien el aire si alguna vez llegaras a levantar la cabeza. Vas fijando los ojos en los adoquines mientras descansan para después atreverse a ser elevados hasta la altura de algún escaparate de ropa, libros, viajes o lo que sea menester.  Antes hasta forzábamos el cuello y elevábamos nuestra mirada para leer los títulos de las películas que estaban poniendo en cada cine. Ya ni siquiera vale la pena subirlos tan alto.
Pero tiene sus encantos la ciudad. Es en la gran urbe dónde se acuñan conceptos como “café rápido”, ”caña ligera”, “un vino volando”. Es en la gran ciudad dónde si quieres garantizarte que vas a encontrar a alguien conocido, has de quedar con él o ella previamente en un lugar preestablecido. Es en la ciudad dónde te planteas que el domingo es un gran día para ir de compras…

domingo, 11 de marzo de 2018

Brindis en la finca antigua



Hola a todas y todos.  Ha pasado demasiado tiempo. Prácticamente un año de mi última aportación a esta sección. Y no hay excusas que valgan. O sí. Depende como se mire. Este último año mi cámara ha estado mas tiempo en su bolsa que paseando conmigo. Y cuando ha salido ha sido para cuestiones mas prosaicas y relacionadas con el trabajo. Quizás haya sido eso.





Pero aquí estamos de nuevo. Ignoro la regularidad con la que pueda seguir asomándome por aquí, pero hoy quiero invitaros a brindar. Este fin de semana he tenido la ocasión de conocer una bodega manchega, y además los cielos se aliaron para crear paisajes inolvidables. Así que aquí os los traigo para compartirlos.



La bodega se haya entre Toledo y Cuenca, en un terreno elevado plagado de carrascas y con vistas maravillosas hacia la manchuela conquense.


La visita incorporaba una cata de los productos de la tierra, bien explicados, y mejor degustados en un salón de cata con vistas únicas.


Brindar y degustar con los caldos que produce la tierra viendo como se acercaba la tormenta sobre las encinas que entreveran el paisaje de viñas fue todo un placer para los sentidos.


 Las copas perfectamente alineadas aguardan el momento de contener el trabajo de meses o años en barricas durmiendo en las profundidades de la bodega.


Fuera, las nubes que no pararon de descargar el agua siempre bien recibida en la Mancha se reflejaban en la lámina que flanqueaba la entrada a la bodega.



Una bodega construida con las mismas piedras calizas que la tierra afloró al horadarla.



 Las borrascas que nos visitan se encargaron de poner el fondo a la llanura que recibe el agua como promesa del futuro vino en que se transformará-


No podía faltar la nota añil en las construcciones típicamente manchegas... 


 En la tienda, no necesitaban cuadros. Las ventanas ya eran suficientes para enmarcar la naturaleza en estado puro


 Y terminó la visita a la finca antigua brindando con el vino que antes habíamos aprendido a degustar...


... en un lugar de la Mancha


Espero que este paseo haya sido de tu agrado. Y también espero no tardar otro año en volver a asomarme por aquí... hasta entonces.... CHAO!!!



JLROMERO
@romerojl

“El Diario” De “Pesadilla en Zocodover”


No es de duelo el silencio, es de culpa, mujer.
Es duro confrontar, complicado denunciar, la cobardía es un escape natural a nuestra incapacidad de afrontar el daño ajeno. ¿Qué somos?

En un capítulo del libro “Pesadilla en Zocodover” cuento la historia de un diario que termina bruscamente en un poema inacabado con una firma de sangre. Un diario que narra ilusiones de juventud y la obcecación de un amor que niega la realidad de la ofensa física y moral.

viernes, 9 de marzo de 2018

¿De qué color es el Feminismo?


 Ricardo G-Aranda Rojas (@rgarciaaranda)


Qué vergüenza cuándo alguien a quien se le supone un cierto nivel intelectual como mérito para haber llegado a ministra (yo se lo supongo) se siente en la necesidad ideológica de autodefinirse  como “no feminista”. Como diría el maestro Aguilar ¿oiga, pero esto qué es?

Si yo digo que me considero feminista porque:
-Defiendo la igualdad entre el hombre y la mujer, en la casa, en el barrio, en el trabajo.
-Pido  medidas formativas  para combatir la violencia de género.
-Exijo a los parlamentarios que  legislen con eficacia contra los asesinatos de mujeres.
-Discuto al resto de los hombres cualquier atisbo de sentirse superiores.
- Lucho porque las condiciones laborales de la mujer y del hombre sean exactamente iguales en cualquiera de sus capítulos.
¿Soy por ello un extremista?

viernes, 2 de marzo de 2018

Pesadilla en Zocodover (III) Desde Lisboa: “La Guerra de las Almas”


 Ricardo G-aranda (@rgarciaaranda)



Hablar de almas en Lisboa es como provocar a lo desconocido, a algo que sabes que te rodea pero no ves, no palpas, no llegas a entender, o sí… 

Sientes un terciopelo agradable mullendo tus más íntimos sentimientos. 

Hay lugares únicos en el mundo, Lisboa es uno de ellos. Es una ciudad para andar despacio, mirando a las fachadas, regodeándote en las estatuas (una al menos en cada largo o plaza), en el rio-mar, en las piedras de sus muros. Apetece hablar en voz alta para escucharte en ella, mirar a los cristales de los escaparates para verte en ella. Es una ciudad ideal para soñar. Y para encontrar respuestas.